Como cada finde, esta discoteca fue un desfase, en donde las borrachas estaban en cada esquina. Las chicas esperan ansiosas esos días para soltarse la melena, sobre todo en verano donde golfean como nunca. De hecho, más de una terminó sin bragas y dejándose follar por algún camarero cachas o un stripper, los cuales se pusieron las botas en medio de la pista de baile. Otras se conformaron con zamparse un buen rabo y demostrar que chupando pollas, son todas unas expertas.