Como su novio no podía acudir al taller, mandó a su novia a recoger la moto. Ella es una gorda tetona muy sexy y, cuando apareció por allí, vio como el mecánico le miraba las tetas y sus curvas. Fue entonces cuando pensó en una buena idea para no pagar el arreglo, y fue ofreciendo su cuerpo de obesa para que lo disfrutase en un polvo. El tipo jamás había follado con una chica tan rellenita, pero no quiso desaprovechar la ocasión y al final, disfrutó de ella y de sus curvas en una bestial cabalgada.