Volvía a casa y por el camino, esta joven rusa con unos brackets muy sexys, vio como un desconocido se le acercaba con una propuesta. Le gustó mucho su sonrisa y además parecía tener un cuerpo muy bonito, así que le ofreció trabajo como modelo erótica. Ella acabó aceptando, pero terminó haciendo algo más que posar, ya que tenía al chico comiendo de su mano y con un empalme considerable. Así que al final aceptó grabar porno duro y recibiendo una follada brutal, dejando una escena donde demostró que puede ser toda una zorra.