Como los dos tenían el día libre, esta rusa y su chico decidieron irse de picnic juntos al bosque, sin nadie cerca que pudiese molestarse. Así podrían relajarse con el aire puro y el paisaje, además de meterse mano sin cortarse un pelo. Lo que pasa es que la cosa pasó a mayores entre los dos y al final, aprovecharon el momento para echar un buen polvo. Fue toda una experiencia, ya que ninguno lo había hecho al aire libre pero como vemos, parece que ambos la disfrutaron a lo grande.