Fue al cuarto donde guardan los archivos y lo último que esperaba encontrarse este tipo, era a su compañera de trabajo Carolina Abril de rodillas y exhibiendo su culo a cuatro patas. Parece que se le habían caído algunos papeles y andaba recogiéndolos, aunque él más que ayudarla lo único que tenía era ojos para su trasero. Empezó a meterle mano y vio como la morena le seguía la corriente, hasta no poder evitar besarse y follar en medio del pasillo de la oficina.